Hoy es mi cumpleaños. Y estoy feliz de escribir este día. Y que tú lo recibas. Escribir más allá de mi trabajo es mi regalo. Escribo desde Oaxaca y sus bahías, que de felicidad han teñido estos días.
La vida está viva, y creo estamos todos en tiempos de movida, donde se nos invita a más. Más de nosotros, más de lo que suma, más de lo que sana. Y menos de lo que resta o pesa. Pero hoy quise hacer una pausa, hoy que para muchos es un día de prisa. Contestar llamadas, mensajes y carreras. Poner buena cara y tirar sonrisas. Hoy elegí pausar conmigo, y sentarme a integrar todo lo vivido. Cliché, ajá. Pero qué importante sentarse a integrar, me imagino que es como si los eventos de la vida fueran los ingredientes del pastel, pero sin revolverlos, y estas pausas es justo eso, mezclar la harina, los huevos y el azúcar, para que se cree lo que desde el inicio fue el propósito.
Hacer inventario personal, tomar nota mental. De lo qué hay, lo que falta, lo que sobra, lo que ya caduca y lo que se agrega.
He de contar que nunca he sido fanantico de mi cumpleaños, muchos años no era más que un fastidio lleno de anhelos. Era curioso, recibía muchos regalos siempre, pero yo me sentía vacío viendome honesto y de frente.
Algo que me encanta de hacer inventarios es poder reconocer. Reconocer lo camino, lo sanado y lo ya integrado.
Hace dos años elegí pagar un viaje para mi y otra persona a la playa lleno de ilusión. Al mes esa persona me rompió el corazón. Y se rio de mi y la situación. Hace tres años no hice absolutamente nada, sentía que en verdad a nadie le importaba. Hace cuatro años me emborraché hasta quedar casi inconsciente, por desgracia no logre apagar mi mente. Cada cumpleaños solía ser un recordatorio de que cumplía otro año de vida, y esta no era nada de lo que quería. Más que un festejo era presión, de sentir que mi vida se iba, y yo lo sabia. Y no hacía nada por aquello que quería
. Este año es muy distinto, porque yo soy distinto. Este año cierro los ojos y me abrazo con los dos brazos, porque en verdad me amo sin rodeos. Y no llego de la noche a la mañana, o por una meditación mágica. Llego porque lo construí — y otras muchas cosas destruí—
Y de todas ellas hice una lista.
Hoy elegí venir al mar porque quería limpiar. Regenerar. Ordenar. Soltar. Respirar. Siempre me ha dado la impresión que el mar es eso. Y siempre me ha gustado la idea de parecernos. Fuerte y suave, profundo y cristalino, libre y calmado. Todo a la vez. A su vez.
Ayer me senté a escribir frente el mar, a quien he sido, a quien ya he vivido. Te dejo mi lista e inventario, no me explicaré en cada punto. Quisiera que lo hagas tu contigo. Que te llegue y te mueva lo que tenga que, sin interferencia ni filtros.
20 LIFE LESSONS ~
No eres “demasiado” tú. Eres tú.
La vida si puede ser como tú quieres que sea. No tengas miedo de creerlo.
Solo puedes sanar, lo que te das permiso de sentir.
No creas todo lo que tu mente dice.
No busques solo respuestas. Haz mejores preguntas.
Todo lo que quieres ocultar y otros te quieren arrebatar, son la llave a tu éxito y libertad.
Humano + vulnerabilidad= humildad. Se humano. Se vulnerable. Se humilde.
Puedo hacerlo solo. Pero no es necesario hacerlo solo.
Todo el amor que buscas, está en donde menos piensas. En ti.
No sigas donde ya no estás.
El perdón y la compasión son sanación.
De quien te rodeas te conviertes. Elige sabiamente.
No hay nada más dañino, que negar quién eres y quieres ser.
No le busques sentido a todo en la vida. Busca sentirlo todo en la vida.
Dios es más real de lo que crees.
Nunca es tarde o temprano, siempre estás a tiempo.
Esta bien no seguir un camino. Eres libre de construir tu propio camino.
Que tu vida no parezca que tuviste miedo de vivir.
Vive por fuera, como quieres vivir por dentro.
Confía en tu creatividad, confía en tu autenticidad, confía en lo que amas.
~
Espero que algún (o algunos) puntos te muevan algo y si quieres, integrarlos. O al menos intentarlos. Me falta mucho camino por caminar, pero algo — o mucho— he aprendido en el andar. Y hace años decidí usar todo eso y crear. Y ayudar. Y quiero, hoy en “mi día” reconocer que para el mundo soy un regalo, no desde el ego o la superioridad, sino por primera vez, celebrarme y darme mi lugar.
Tengo muchos regalos por contar, y ninguno es material. Algunos tienen ojos y pies, otros cuatro patas y orejas largas, otros están dentro de mi, y otros están por venir.
gracias por leerme, ten por seguro que estás en lista de presentes. Porque de algún modo existe una conexión, que va más allá de algo lógico o con razón.
Y gracias a la vida, que tanto me regalas.Y a mi, que me he atrevido a usar las alas. Que el cielo siempre estuvo ahí, y las alas también, solo que el cielo si lo podía ver, en las alas primero me tocó creer.
Love, Abner <3